Desgraciadamente las minas antipersona siguen a día de hoy causando tragedias y dejando huérfanos, viudas y amputados a lo largo de todo el país.Son muchas las iniciativas llevadas a cabo durante todos estos años, pero las zonas más remotas siguen siendo las más peligrosas.
La mayoría de ellas fueron puestas durante la sangrienta Guerra de Vietnam, en la que el ejército vietnamita del norte utilizó tierras camboyanas para poder atacar con más fuerza a su rival Vietnam del sur junto con su mayor aliado, Estados Unidos.
Los americanos colocaron y lanzaron desde el aire miles y miles de ellas cerca de la frontera con Vietnam para poder así contener el ataque enemigo.
En la guerra civil camboyana también se pusieron muchas de ellas. Muchas veces para evitar el paso de tropas enemigas, otras simplemente para protegerse mientras las tropas pernoctaban en medio de la jungla.
Lo ha fundado el que fue un guerrillero en la guerra civil camboyana. Colocó miles de ellas y las conoce a la perfección. Le educaron desde niño como soldado y no fue hasta muchos años después que se dio cuenta de lo que estaba haciendo.
Fue entonces cuando decidió fundar el museo (2 $) y la ONG que ayuda a todas las víctimas. Además de ayudar a la desactivación de las mismas.
La visita al museo se puede realizar de camino al Templo de Banteay Srei.
(Mas info: www.cambodialandminemuseum.org)
E-Mail: unpaseilloporelmundo@hotmail.com
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